Saturday, March 10, 2007

saBADdo

Son las 6:30 AM. Me acaba de levantar un ruido espantoso que después de salir azorada de mi cama me parece son las tuberías de mis caseros, arriba. Por poco me da un fucking ataque, me cagué. Y para calmarme, comencé a colar café. Me acordé entre las mil cosas que soñe, que había una en la que mis labios podían detectar cambios en la temperatura atmosférica.....Decido sentarme frente a la compu. Desde el jueves le huyo a este espacio porque se me borró un post bien largo que me dio por hacer. A mi computadora le dio una....parálisis y traté de salvar lo escrito pero no pude, y quedé medio muda. No voy a reescribir ese post. Voy a hacer como si se lo estuviera contando a Amor (quien me dice que de ahora en adelante escriba primero en word y después lo pase acá, cosa que se me olvidó hacer....)
Le tengo un relajo a Amor de que si yo también estudiara cine mi tesis se titularía: Cary Grant: Man Running on Film. La razón es que me llama la atención la manera en que los actores se mueven en el cine (chequéense cómo corre Grant en North by Northwest y díganme si no es la quintaesencia de lo debonnair). Bueno, pues seguí contándole que no estaba de acuerdo con que Lily Taylor (a quien ADORO desde Say Anything) estaba impecable en Factotum. Le dije que me pareció que le estaba poniendo mucho "turbo" al cuerpo, entiéndase overdoing it. A manera de ejemplo le dije que cuando yo voy al baño a vomitar no voy con pasitos de tecatita, voy corriendo recto y rápido y mi cabeza va moviéndose hacia abajo presagiando la llegada al inodoro. En la misma película sale Marisa Tomei (en mi escuela habían unas Tomei y hasta el día de hoy juro que son primas) y le pasa algo similar: están en el yate del ricodrunk y una de las muchachas se pone necia o algo y el viejo decide regresar y Tomei se le sienta al lado a Matt Dillon y la pose que pone es como si estuviese retratada en Ray Gun, con los dedos de los pies apuntando hacia adentro y las rodillas apuntando hacia alfrente en una pose que en los early nineties le hubiésemos llamado heroin chic. Yo le decía a Amor que yo en un bote borracha y mareada me sentaría con las rodillas mirando unsexymente hacia afuera como viejita en bata de casa que cree tener pantalones puestos.
El post seguía diciendo no sé qué, creo que daba otros ejemplos de mi tesis y luego ofrecía mis servicios a los actores del patio. Hey, si alguien se hizo rica enseñándole a Arnold a pronunciar, yo puedo sacar un buen guisito como movement coach, con todo el cine que se está haciendo aquí.
Ahora en el lado serio, si quieren morirse con buen movimiento en cine, TIENEN que ver Tales of Hoffmann (gracias, EDUARDO!!!). Es la cosa más espeluznante y alucinante (hello, Fofé) que jamás haya visto.

1 comment:

Luis said...

"Man Running on Film: Carey Grant and the quintaessence of debonnair movement" revolucionará los programas de film studies 4 ever...